Eduardo Arroyo (n. Madrid, 1937) es un pintor español de estilo figurativo vinculado al pop art. Clave de la nueva figuración española, Arroyo cobró protagonismo en el circuito artístico nacional tardíamente, a partir de los años 80, tras un alejamiento de dos décadas forzado por el régimen franquista. Actualmente, sus obras cuelgan en los más reputados museos españoles y su creatividad se extiende a las escenografías teatrales y las ediciones ilustradas.